#PaísesBajos – Endurece su política migratoria: controles fronterizos y restricciones al asilo
Países Bajos endurece su política migratoria: controles fronterizos y restricciones al asilo
El Gobierno de Países Bajos ha anunciado un conjunto de medidas que afectan directamente a los migrantes y solicitantes de asilo. Bajo el argumento de una “crisis de asilo”, el país reintroducirá controles fronterizos con Alemania y Bélgica a finales de noviembre, endureciendo las condiciones para quienes buscan ingresar o permanecer en territorio neerlandés.
Estas nuevas disposiciones permitirán devolver a personas migrantes en situación irregular o a solicitantes de asilo que hayan registrado su petición en otros países europeos. La decisión, que se aplica bajo el artículo 25 del Código de Fronteras Schengen, refleja una creciente tendencia en Europa de limitar la movilidad para abordar la presión migratoria.
Un sistema de asilo cada vez más restrictivo
Además de los controles fronterizos, Países Bajos planea limitar los permisos de asilo a un máximo de tres años y restringir la posibilidad de reunificación familiar. Estas medidas buscan reducir la cantidad de migrantes y solicitantes de asilo en su territorio, bajo el argumento de que el sistema actual es “insostenible”.
La coalición gubernamental liderada por Geert Wilders, conocido por sus posturas antimigratorias, ha impulsado estas restricciones tras meses de negociación. Aunque algunos partidos rechazaron declarar una crisis nacional de asilo, lo que habría permitido actuar sin aprobación parlamentaria, las propuestas avanzarán para votación en las próximas semanas.
Impacto en los derechos de los migrantes
Estas políticas endurecen significativamente las condiciones para las personas migrantes y solicitantes de asilo en Europa, quienes ya enfrentan dificultades derivadas de otras medidas restrictivas en países como Alemania y Austria. La reintroducción de controles fronterizos supone un retroceso para el espacio Schengen, un acuerdo que por años garantizó la libre circulación en Europa.
Para las personas migrantes, esto representa un desafío adicional, afectando no solo su acceso a servicios y protección, sino también sus derechos básicos, como el de la reunificación familiar.
Europa y su enfoque hacia la migración
La decisión de Países Bajos se suma a una ola de políticas restrictivas en Europa, donde el discurso migratorio se enfoca cada vez más en la seguridad y la reducción de flujos migratorios. Estas acciones generan incertidumbre para quienes buscan refugio o una oportunidad de vida en el continente, mientras se intensifican las barreras administrativas y físicas.
